“El PJ tiene que recuperar el protagonismo en la provincia y volver a ser el espacio donde se discutan las diferencias”

En tiempos donde abundan las internas y los personalismos altisonantes, las palabras de Darío Menna invitan a recuperar la esencia política del Partido Justicialista: ser una herramienta colectiva para transformar la realidad. Frente a la lógica de la fragmentación, el intendente de Río Turbio propone volver al debate franco, al protagonismo de las unidades básicas, y a una definición política de candidaturas desde el territorio, con convicciones y sin exclusiones.
“El congreso justicialista va a tener la posibilidad, creo que después de muchísimos años, de elegir quién quiere que lo represente como candidato a diputado nacional. Ese es el eje sobre el cual tenemos que volver a construir protagonismo. Hay que discutir, claro que sí. Vamos a tener diferencias, pero esas diferencias hay que discutirlas dentro de la casa del peronismo”, afirmó el jefe comunal.
Menna subrayó que el PJ debe recuperar su papel histórico como ordenador político en Santa Cruz, y advirtió sobre el riesgo de perder de vista lo verdaderamente importante: “Muchos hablan de suspensiones, de expulsiones, pero lo fundamental hoy es que el partido vuelva a tener voz y decisión. Que vuelva a tener protagonismo real en la definición de candidaturas, con todas las sedes locales, unidades básicas y agrupaciones participando activamente”.
En ese marco, el intendente planteó la necesidad de reconstruir el peronismo provincial con una mirada amplia e inclusiva, sin caer en falsas dicotomías: “Algunos dicen ‘los viejos afuera’, pero no es con exclusiones. Es con todos los que tienen convicciones e ideales firmes, con todos los que compartimos el rumbo hacia dónde queremos ir como provincia y como partido”.
Finalmente, Menna dejó un mensaje claro para la militancia peronista: “Tenemos que hablar de lo importante: qué queremos para nuestras localidades, quién nos representa mejor, y cómo reconstruimos el PJ con las puertas abiertas. Ese es el desafío que tenemos por delante”.
En Santa Cruz, donde la historia del peronismo está íntimamente ligada al desarrollo provincial, no hay espacio para más deserciones ni mezquindades. Menna plantea una agenda clara: abrir las puertas del partido, discutir con respeto las diferencias, y dar lugar a una nueva generación que construya desde la lealtad, pero también desde la realidad. Porque lo que está en juego no es solo el destino del PJ, sino el futuro de una provincia rica en recursos, pero amenazada por el ajuste, la desindustrialización y el centralismo porteño.