El padre Sergio Soto recordó, como cada año, lo que fue la tragedia en la que 14 Mineros de Río Turbio, 28 de Noviembre y el vecino país de Chile fallecieron aquel 14 de junio de 2004 en el socavón de Mina 5 de YCRT.

En esta oportunidad, envió un audio desde Río Gallegos para estar presente: “Nos encontramos una noche más en este lugar, que nos recuerda que hubo una nueva historia a partir del 14 de junio de 2004, que ya se venía haciendo. Amar esta tierra, afincarse a ella, tener esperanza, que ya se nos iba diluyendo por mucho tiempo después de tantas olvidadas gestiones que nos hicieron ser casi el patio del país”, expresó.

“Nacimos de vuelta. Su muerte no fue en vano. Cada uno de nosotros abrazaba a otro hermano llorando. Esas manos frías en aquella búsqueda, esa salida de cada uno de nuestros hermanos que estaba ahí en la mina nos hicieron recordar cuanto nos necesitamos. Nosotros elegimos este lugar. Esa lucha tuvo un sentido profundo desde aquel 14 de junio”, resaltó.

“Unámonos. La pandemia quizás hace fácil, para algunos, olvidar ese momento que tuvimos y que nos hizo hermanos. Volvamos a ser más hermanos. La Cuenca fue todo un pueblo, eso nunca me olvido. Todos los estamentos, instituciones, fuerzas civiles y de seguridad, todos éramos uno. No nos olvidemos que una noche fuimos hermanos, y lo seremos para siempre”, enfatizó.

“Que podamos decir siempre gracias Cuenca Carbonífera, gracias carbón, gracias Mineros por hacernos una vida con mayor sentido y que nos hayamos encontrado acá, a razón de nuestras vidas”, culminó.