“Decoud no habló de despidos ni privatización, sino de un plan de venta de carbón”
La secretaria adjunta de la Asociación Trabajadores del Estado – seccional Río Turbio, Yanina Silva, brindó detalles acerca en el programa radial “Punto de Encuentro” acerca de la reunión que mantuvieron los sindicatos con la intervención de Yacimiento Carbonífero Río Turbio (YCRT).
En diálogo con FM El Portal, Silva detalló que se pudieron reunir con el interventor Thierry Decoud en Buenos Aires durante dos jornadas: “Como prioridad, llevamos adelante el salario de los compañeros y el impacto negativo que tuvo esto en la localidad, les tratamos de hacer comprender cuál es la realidad de trabajar en el sur, en una mina de carbón”, subrayó.
“Después de una discusión e intercambios, logramos poder sentarnos a negociar el tema de las actas, que era lo que más impactaba en los salarios porque no las habían pagado. Pudimos acordar algunas cuestiones que hacen a la recuperación del salario de los compañeros. El martes se verá impactado, en el sueldo de los agentes, el acta de los 100 mil que se había firmado y homologado el año pasado”, expresó.
En este sentido, agregó: “Además, trabajamos en las actas particulares de los sindicatos. En nuestro caso, logramos negociar 5 actas que tienen que ver con el impacto económico. También tenemos otras que tienen que ver con los administrativos”.
“No se habló de despidos ni privatización de la empresa sino de un plan productivo de venta de carbón. Si bien habíamos presentado con los otros sindicatos la prioridad de vender energía a través del carbón, la intervención quiere vender carbón y no descarta la usina, que por el momento quedará para una auditoría técnica. Haber tenido una mesa de diálogo para recuperar el salario es positivo”, indicó.
Sobre la visita de Thierry Decoud, dijo: “La intervención nos manifestó que vendrán a la provincia de Santa Cruz, no hay una fecha concreta, tanto a Río Gallegos como Río Turbio para recorrer las dependencias del Yacimiento. Es importante que sepan el trabajo de los mineros, es una realidad distinta a la que tienen ellos en Capital Federal”.