“La pandemia me dejó en claro que cada músico tiene que producirse”

HOY ROCK 22 de diciembre de 2020 Por Amir Navarro
Desde El Calafate, Franco Behrens habló con Hoy Rock, Mañana El Mundo acerca de cómo comenzó en el rubro de la música, cómo fue dedicarse a la música este año y le dio consejos a los jóvenes.
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Franco Behrens es guitarrista, músico de El Calafate, integrante de La Kandonga y dueño de la sala de ensayo y grabación Linda Vista. En “Hoy Rock, Mañana el Mundo” habló acerca de cómo fue trabajar en el rubro en este año tan particular y brindó consejos a quienes quieren incursionar en la música.

Vanina: ¿Cómo comenzó la música en tu vida? 

Franco: Yo a la música no tenía un acercamiento. Mi viejo tenía una banda de música donde se juntaban a hacer canciones evangelistas pero lo mirábamos de lejos y no se podía tocar. Antes de venirme a El Calafate estaba con una guitarra acústica sacando temas de la radio y para esa época conseguí una guitarra, que tengo hasta el día de hoy.

En 2005 vine al sur y ni bien llegué me aboque a ver qué sucedía con eso. Me fui juntando con gente que tocaba, que hacían fogones por la cosa social y para no estar solo. Ahí empecé a conocer gente, al tiempo que entré a trabajar con una papelera y uno de los integrantes era DJ. De un rato para el otro empecé a tocar la guitarra, conocí a los chicos de la murga, ahí me compré la trompeta. Una cosa llevó a la otra.

Al tiempo conocí a Mariano Escalante que me invitó a ser parte de un proyecto “Cero Frío”. Me convocaron como cantante, fue una experiencia que me nutrió mucho de esas cosas que fueron el acercamiento a los escenarios y los proyectos con las bandas, componer canciones. En simultáneo arranqué con La Kandoga. 

V: ¿Si tuvieras que elegir un estilo musical que te identifique, cual sería?

F: No tengo un gusto definido con la música. Estoy contento por no haberlo decidido porque el tiempo me dejó en el lugar de “ingeniero de sonido” con lo de la sala y la verdad que me sirvió mucho no tener un palo definido para sorprenderme con las cosas que escucho. Sobre todo poder aportar a la música y a quienes quieran grabar una canción. Me gusta mucho lo divertido de la música. Trato de quedarme con esa parte, con la que te saca del estado en el que estas.

V: ¿Cuál es el recital que te generó una emoción, qué te marcó como músico?

F: Yo disfruto el escenario, no importa que esté haciendo, desde una zapada, como las que hacíamos en Don Diego que eran canciones del montón o una que sepamos todos, o pasaba un turista tocando la armónica, o en época de la Fiesta del Lago que caían los músicos de Kapanga o Abel Pintos y estaban al lado tuyo. Me considero suertudo de poder hacerlas. Todo el tiempo disfruto de hacer música. 

V: El proyecto de la sala es algo que sueña todo músico. ¿Había muchas salas en El Calafate? ¿Cómo incursionaste?

F: Lo de la sala fue una necesidad personal. Si te digo que le hacía falta al pueblo y puede que tenga una cuota de realidad pero en realidad era algo que necesitaba. Todo lo que aprendo, todo lo que me motiva a hacer cosas tiene que ver con la sala. Quiero que sea algo más abierto para la gente.  

V: ¿Recordás cual fue la primera banda que grabó En Linda Vista?

F: Cada proyecto que arranca es como una adrenalina nueva. Yo arranqué haciendo pruebas piloto con dos bandas de punk, una con Banca Rota y la otra es No Hilux. Por esos momentos era la necesidad de plasmar eso que veníamos investigando con el equipamiento. Queríamos empezar a producir. Hace un par de años que se sumó Juanse Robles como guitarra en La Kandonga, está muy comprometido con la música. Las etapas de los discos las disfrutamos mucho.

V:  ¿Qué hay que tener en cuenta para grabar en Linda Vista?

F: No tienen que tener nada en cuenta. Uno puede aportar una visión artística o de ajuste o clásico. La pandemia me dejó en claro que cada músico tiene que producirse. Del pueblo salieron entre 4 o 6 proyectos con formatos home studio, que es con lo que arranqué. La diferencia en el audio uno la construye. Lo que mejor le puede pasar a un músico es que le dé una vuelta de rosca a lo que está haciendo y se produzca a sí mismo.

Amir Navarro

Redactor Diario El Cóndor